España. El brasileño se encuentra bajo cuidado por problemas de depresión.
Por: Daniel Herrera
Dani Alves está recluido en el Centro Penitenciario Brians 2 en Barcelona, España, a la espera del veredicto sobre el caso que es llevado en su contra por una acusación de abuso sexual que interpuso una joven tras un hecho presentado en una discoteca de la ciudad.
Ante una posible situación de suicidio por parte del exfutbolista del Barcelona, este se mantiene bajo vigilancia de la seguridad en la cárcel.
La periodista y presentadora de televisión española, Emma García, resaltó que la prisión decidió ajustar las medidas de seguridad y vigilancia para evitar que Alves se quite la vida, debido a que su estado de ánimo no es el mejor en este momento.
“Se han tomado medidas extremas. A raíz del juicio le ha pegado el bajón. Está como deprimido, cabizbajo. Los educadores y funcionarios están arropándolo por miedo de que se cortara o intentara hacer alguna locura o historias de esas. Estuvo con ese protocolo al día siguiente del juicio”, señaló en el programa Telecinco el recluso que es compañero de Dani Alves.
Así las cosas, las autoridades de la prisión han optado por tomar un protocolo de tres pasos: ‘evaluación de riesgo’, ‘medidas de seguridad’ y ‘programas de apoyo’.
Alves se encuentra en permanente evaluación de su estado y la vigilancia ha crecido para el control de accesorios peligrosos.
Este nuevo control también trata sobre el apoyo emocional para los presos con terapia individual, actividades de ocio para la distracción y asistencia de grupos de autoayuda.