Hernández comenzó su mala racha en 2012 con Junior.
El pequeño talentoso Vladimir Hernández llegó en enero a un equipo ganador como Atlético Nacional, pero tras dos finales no ha podido agrandar su historial de títulos que dejó en tres luego de su salida de Junior. En cambio, lo que incrementó fue su antirécord de finales pérdidas en Medellín, donde ya ha caído en seis definiciones.
El nacido en Arauca quería que el sábado ante Tolima la sexta fuera la vencida en el estadio Atanasio Girardot, pero luego de estar cerca de ser el héroe al anotar el gol del empate transitorio que le daba el título a los verdes, terminó siendo uno de los villanos al fallar uno de los penales en la definición que los pijaos ganaron 4-2 para coronarse campeones por segunda vez en la Liga, la misma cantidad de títulos de Vladimir, ambos con Junior.
Precisamente con el equipo barranquillero comenzó en 2012 lo que parece ser su maldición en el Atanasio Girardot, cuando los curramberos fueron doblegados por Nacional en la primera edición de la Superliga, tras caer 3-1 en Barranquilla y 3-0 en la capital de Antioquia.
Dos años después empezaron las derrotas en la Liga. En el Torneo Apertura de 2014 el Junior dirigido desde la tribuna por Julio Comesaña y en la cancha por David Pinillos cayó en penales frente a Nacional, al perder 2-1 en la capital de Antioquia después de haber ganado 1-0 en Barranquilla. En el juego definitivo Hernández no actuó.
Ante el mismo rival y en la misma definición, Vladimir sufrió su tercera derrota en finales, en el Clausura 2015. En el Metropolitano los locales habían ganado 2-1 y en suelo paisa los de casa vencieron 1-0, en un duelo en el que Vladimir fue titular y luego reemplazado al minuto 45 por Félix Noguera, quien entró para patear un penal y fue uno de los que falló.
En el Apertura de 2016 tropezó por tercer año consecutivo, esta vez el verdugo fue el Medellín, que venció 2-0 a los 'tiburones' luego de un empate en la ida 1-1. Hernández fue inicialista en ambos compromisos.
En 2017 le puso fin a su racha, pero solo porque no actuó en Colombia y se marchó al Santos de Brasil.
Regresó este año tras una lucha entre Nacional y Junior por sus servicios. Finalmente los verdolagas pusieron más verdes (dólares) para ficharlo.
Siendo local en Medellín daba la impresión que la mala racha podía finalizar, pero a poco de su llegada, en febrero pasado, la situación tomó tintes de maldición cuando Nacional perdió la Superliga al ser derrotado 2-1 en el Atanasio por Millonarios, con los únicos goles del semestre de otro exjuniorista, el paraguayo Roberto Ovelar.
Cuatro meses después el verdugo fue el Tolima, contra el que Vladimir vio sucumbir por tercera vez a su equipo en penales, en esta con él cobrando, y fallando, por primera ocasión.
Otra más
Se podría decir que son siete las finales perdidas por Vladimir jugando en Medellín, pero cabe aclarar que en la final de la Copa Colombia de 2016 la serie finalizó en Barranquilla. En la ida, en el Atanasio, Nacional ganó 2-1 y en la vuelta, en el Metropolitano, 1-0. Esa fue la última final en la que el araucano defendió los colores del club rojiblanco.
No ha ganado
Vladimir no solo ha dejado escapar todos los títulos a los que ha aspirado en Medellín, sino que ha perdido los siete partidos de finales, cinco veces siendo visitante y en dos como local: 3-0 en 2012, 2-1 en 2014, 1-0 en 2015, 2-0 y 2-1 en 2016 y dos veces 2-1 en 2018. Como pueden notar, la derrota 2-1 lo ha acompañado en cuatro ocasiones.
En esos juegos apenas anotó un gol, en la del pasado sábado frente al Deportes Tolima.