Inglaterra. Tottenham y Aston Villa fueron sus verdugos.
El campeón Liverpool y Manchester United sufrieron el domingo sendas goleadas de escándalo en la Liga Premier del fútbol de Inglaterra.
Fuera de casa, Liverpool fue humillado 7-2 por Aston Villa para el fin del arranque perfecto de la defensa de su título, luego de haber ganado sus primeros 3 juegos.
Ollie Watkins firmó una tripleta y Jack Grealish anotó dos goles para un Villa demoledor. El club de Birmingham ha arrancado la temporada con un pleno de tres victorias tras salvarse del descenso en la última jornada de la pasada temporada.
El Villa suma nueve puntos para situarse de escolta del líder Everton, que acumula el ideal de 12 puntos por sus cuatro victorias en igual número de partidos. Leicester, Arsenal y Liverpool también están a tiro con nueve unidades.
Liverpool se convirtió en el primer campeón reinante de la Premier que encaja siete goles en un partido. La última vez que eso ocurría en la primera división del fútbol inglés fue en 1953.
Con el brasileño Alisson Becker descartado por una lesión en el hombro, Adrián quedó de titular en el arco de Liverpool y su error propició que Watkins anotase a los cuatro minutos.
Antes, Tottenham, con el colombiano Davinson Sánchez como titular, despedazó 6-1 al Manchester United, dejando en evidencia el endeble andamiaje defensivo del equipo de Ole Gunnar Solskjaer al propinarles su peor derrota como local en la Premier.
Sólo una vez desde 1930 el United había encajado seis goles en su feudo — ante el Manchester City hace nueve años. Y habría que remontarse a 1986 para la última vez que el United abre la liga inglesa con derrotas sucesivas en casa.
Esta fue una derrota sin paliativos ante un Tottenham dirigido por José Mourinho, despedido a inicios de 2018 para darle cabida a Solskjaer. Y contra un equipo que ha disputado ocho partidos en 22 días, al verse involucrado en tres competiciones.
Tanguy Ndombele (4'), Son Heung-Min (7', 37'), Harry Kane (30', 79' penal) y Serge Aurier (51') marcaron para el visitante, remontando el tempranero gol de Bruno Fernandes (2' penal).